Disimulando canalización

Aquí va el primero de la serie de posts sobre la reforma del taller, aunque hay tanto de lo que hablar que casi no se ni por dónde empezar.

Cuando todo necesita algún retoque y tienes que hacerlo tú mismo, la imaginación se pone en marcha para solucionar todos esos “problemillas” que se presentan. Así que, en esta esquina con una enorme chimenea proveniente del piso de abajo que había que mantener. Pero quería camuflar, decidí aprovechar su potencial para transformarla en otra cosa.

antes

Como veis, no exagero al decir que es enorme, tiene un diámetro de unos 40cm por los 3,50m de altura del local y muchas capas de pintura antiguas 🙂

Teniendo en cuenta la textura que tiene, la forma, el tamaño y su ubicación. Decidí hacer un árbol del que saldrían unas ramas con hojas vistosas para distraer la atención de la tubería. Y con todo esto en la cabeza, me lance a hacerlo.

Lo primero, dibujarlo para hacerme una idea general del tamaño que darle, Luego pintar en dos colores todo para visualizar todas las hojas necesarias. La verdad, que así también me gustaba, pero con más color mejor.

arbol-amarillo

 

Una vez puestas todas las hojas, que como veis son círculos irregulares. Empecé con el color, en tonos verdes y respetando las zonas que me interesaba mantener en amarillo. La ventaja de que sean irregulares es que quedan siempre bien.

arbol-sinazul

Luego con el color azul repetí el proceso en las hojas, para dejarlas más vistosas. Y este ha sido el resultado final después de pintar el tronco en un color más cálido. ¿Qué opináis necesita un animalito en sus ramas? ¿y de la reforma del taller?

arbol-final

En breve el siguiente post, nos vemos!!!

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